S/RES/2573 (2021)
Reiterando el llamamiento a todas las partes en los conflictos armados para que
cumplan sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario, que
incluyen respetar y proteger a los civiles y procurar constantemente no causar daño a
bienes civiles, incluidos los que son imprescindibles para prestar servicios esenciales
a la población civil, así como abstenerse de atacar, destruir, retirar o inutilizar bienes
que sean indispensables para la supervivencia de la población civil y respetar y
proteger al personal humanitario y los envíos utilizados para las operaciones de
socorro humanitario,
Expresando además preocupación por el uso indebido de bienes indispensables
para la supervivencia de la población civil en contravención del derecho internacional
aplicable, que puede poner en peligro a los civiles y su capacidad para acceder a los
servicios esenciales en situaciones de conflicto armado,
Recordando su profunda preocupación por el uso militar de escuelas en
contravención del derecho internacional aplicable y reconociendo que ese uso puede
convertir a las escuelas en blancos legítimos de ataques, poniendo en peligro la
seguridad de niños y docentes, así como la educación de los niños,
Observando con preocupación las amenazas que plantea para las
infraestructuras civiles, incluidas las que sirven de apoyo a los servicios esenciales
para la población civil, el uso de cualquier medio o método de guerra que contravenga
el derecho internacional humanitario, y los efectos humanitarios potencialmente
devastadores de ese uso en situaciones de conflicto armado,
Observando que los conflictos armados, las violaciones del derecho
internacional humanitario y del derecho internacional de los derechos humanos, y la
destrucción u otros daños causados a bienes indispensables para la supervivencia de
la población civil pueden reducir o impedir el acceso de los civiles a servicios
esenciales en situaciones de conflicto armado, y provocar desplazamientos forzados
o agravarlos, empeorar la propagación de enfermedades infecciosas en esos contextos
y obstaculizar una respuesta eficaz en materia de salud pública,
Reiterando su compromiso de buscar todas las vías posibles para prevenir y
hacer cesar los conflictos armados, entre otras cosas, abordando sus causas
subyacentes de manera inclusiva, integrada y sostenible,
Reiterando la necesidad de intensificar los esfuerzos por resolver los conflictos
armados y construir una paz sostenible y convencido de que la protección de los
civiles en los conflictos armados y la protección de los bienes indispensables para la
supervivencia de la población civil deben ser un aspecto importante a ese respecto,
Reiterando profunda preocupación por el creciente número de civiles afectados
por los conflictos armados en curso y la consiguiente violencia que se enfrentan a las
amenazas de la inseguridad alimentaria creada por el conflicto y de la hambruna,
Observando que la situación humanitaria en muchos conflictos armados también
puede verse agravada por las crisis económicas, los fenómenos meteorológicos cada
vez más frecuentes y extremos, y los desastres naturales, y se ha deteriorado debido
a las repercusiones de la pandemia de COVID-19 y, en este sentido, reafirmando la
necesidad de combatir la pandemia y recuperarse de ella de forma sostenible,
Recordando las obligaciones de todas las partes en los conflictos armados en
virtud del derecho internacional, incluidas las disposiciones aplicables del derecho
internacional de los derechos humanos, y del derecho internacional humanitario,
especialmente la prohibición de dirigir ataques contra civiles y bienes de carácter
civil, el personal médico y el personal humanitario dedicado exclusivamente a tareas
médicas, sus medios de transporte y equipo, los hospitales y otros establecimientos
sanitarios,
2/5
21-05595